Falseta: Frase melódica que se intercala entre las sucesiones de acordes destinadas, bien a acompañar al cante, bien a establecer la propia estructura de una pieza de concierto. Se dice que un guitarrista es largo cuando es capaz de ejecutar muchas falsetas diferentes en un mismo palo.
Fandango: Toque ejecutado a seis por ocho, por lo que se basa en una estructura de compás ternario. En cuanto a la tonalidad, las llamadas se realizan en tonos modales, pero la melodía puede cambiar a tonos menores y mayores en función de los diferentes estilos fandangueriles que existen. Dentro del toque por fandangos hay que destacar el estilo de Alosno, completamente diferente al resto, puesto que los compases siempre van enlazados y no se utiliza el rasgueado. Su principal exponente fue Bartolomé Cerrejón, el Pinche.
Fandangos de Frasquito Yerbagüena: Modalidad de fandango abandolao creada por el granadino Frasquito Yerbagüena que exige grandes facultades en los artistas debido a su alta tesitura y sus cambios melódicos. Actualmente se utiliza mucho para rematar el cante por malagueñas.
Fandangos de Lucena y Cabra: Se trata de una modalidad de fandango abandolao propia de estos pueblos cordobeses. En Lucena se conocen tres estilos distintos: el de Dolores de la Huerta, el de Rafael Rivas, y el de la Calle Rute. Asimismo, en Cabra hay que destacar que su creador y difusor fue Cayetano Muriel.
Fandangos: Para algunos teóricos, éste es el cante más primitivo que existe. Se estructura sobre un compás de 3/4 y tiene una gran variedad tonal. Son coplas de cinco versos octosílabos que se suelen convertir en seis por repetición de uno de ellos. Al parecer, el fandango onubense nace en Alosno, y desde allí se distribuye por el Andévalo, la Sierra y la capital. A partir de ahí se han podido estudiar una infinidad de estilos diferentes, destacando en su ejecución cuatro artistas puntales: José Rebollo, Paco Isidro, Antonio Rengel y Paco Toronjo. Entre los estilos más conocidos están los de Alosno, los choqueros, los de Almonaster, los de Santa Eulalia, los del Cerro del Andévalo, los de Encinasola, los de Calañas y los de Cabezas Rubias. (Fandango de Cepero , del Gloria, del Almendro, del Bizco Amate, del Pichichi, de Aznalcollar, de Manuel Torres, de Almería, de Alosno, de Rengel, de Huelva de Almonaster, de Valverde del Camino del Rebollo de Valverde de Santa Bárbara de Zalamea de Calañas de Encinasola …)
Farala: Volante con que se adornan las faldas o batas cortas o largas de cola que usa la mujer andaluza, y en especial, las bailaoras. Consiste en una tira de tela que rodea al vestido, plegada y cosida por la parte superior y suelta por la parte inferior. El conocido vestido de faralaes.
Farruca: Toque que llegó al panorama flamenco de forma tardía, procedente del folclore gallego. Uno de los primeros en hacerlo fue Ramón Montoya. Se ejecuta sobre tonos menores. Farruco era el nombre con el que los andaluces denominaban a los gallegos, que es de donde procede este cante, con copla de cuatro versos octosílabos que riman segundo y cuarto. La adaptación definitiva al flamenco se atribuye al Loli, aunque su gran impulsor fue Manuel Torre. En la actualidad se puede escuchar la farruca en pocas ocasiones, salvo cuando se acompaña al baile, una danza creada por Faíco que sólo suelen interpretar los hombres. Se asienta en tonos menores y sigue el compás del tanguillo.
Femenino: En el argot flamenco, sonido que emiten las tres primeras cuerdas, también conocidos como agudos o blancos.
Fiesta: En el Flamenco es una reunión de aficionados y cantaores/as en la que predomina el respeto al flamenco, lo que hace que tanto cantaores como bailaores y guitarristas se sientan a gusto, es decir, en la atmósfera idónea para expresar su arte.
Flamenco: Según el Diccionario de la Real academia Española; “Término con el que se designa el conjunto de cantes y bailes formado por una fusión de ciertos elementos de orientalismo musical andaluz dentro de unos peculiares moldes expresivos gitanos”. El flamenco es una manifestación musical folklórica originada en Andalucía, con una existencia de dos siglos aproximadamente. La procedencia de ese término en su significado actual, que parece documentado ya al final del siglo XVIII, está todavía sin resolver.
Frase: Es el nombre que la musicología da a lo que en flamenco se llama falseta, es decir, un motivo melódico intercalado entre acordes.
Fuerza: Característica del guitarrista que indica el nivel de vibraciones que es capaz de sacarle a una cuerda con una sola digitación.
Fuga: Cuando hay dos guitarristas tocando para concierto, se produce una fuga si ambos interpretan al unísono una estructura melódica diferente pero en armonía.
Galeras: Cante creado por Juan Peña el Lebrijano que tiene su base en la bulería. No ha sido acogido por más cantaores, por lo que casi no se puede hablar de que sea un palo autónomo. Sin embargo, sí es cierto que tiene matices diferenciados.
Garrotín: Baile gitano de origen no andaluz pero practicado sobre todo en Sevilla. Posteriormente surge el cante. Se cree que procede de Asturias o del antiguo reino de León, donde se hacían las “garrotiadas”, y luego pasó por Cataluña, donde fue absorbido por los gitanos de la zona. Lo dio a conocer el bailaor Faíco, mientras que en lo relativo al cante hay que citar a la Niña de los Peines, que hizo una gran versión de este estilo. Tiene compás de tango en tonos mayores y las letras suelen ser sencillas de contenido.
Gilianas: Cante emparentado con la soleá que surge tras una derivación de los llamados corridos gitanos. Es un romance sevillano, que cuenta una historia uniforme y monocorde, seguido a la guitarra con el mismo acompañamiento que la soleá. Este cante está prácticamente perdido, aunque recientemente ha sido grabado por Jesús Heredia.
Glisando: Sonido resultante de resbalar el dedo en una misma cuerda por distintos trastes. Es una de las técnicas que define a la granaína, que cuenta con el glisando en su llamada.
Golpe: Percusión dada normalmente con los dedos medio y anular en la tapa de la guitarra.
Golpeador: Lámina de plástico que protege la tapa de la guitarra.
Gordo: Acorde en el que todas las pulsaciones que se realizan dan el mismo tono.
Granaína: Es el fandango de Granada. De ejecución libre. Toque surgido por las exigencias del cante, ya que se ejecuta sobre la estructura de un fandango natural pero con Do mayor / Si mayor como acordes de base rítmica. Esto ocurre porque la granaína es un cante de los considerados valientes que exige una tonalidad más baja al artista. Cante con copla de cinco versos octosílabos que riman generalmente en consonante primero, tercero y quinto, y que al cantarse se suelen en ocasiones convertir en seis por repetición de uno de los dos primeros. Es del grupo de los cantes de Levante y, como la malagueña, toma su estructura del fandango. La mayoría de los expertos atribuye su creación a don Antonio Chacón, que pudo basar su composición en la melodía de la malagueña y estuvo una larga temporada en Granada hacia 1890. Se canta de forma libre y se acompaña a la guitarra en Si debido a su alta tesitura. Grandes intérpretes de este estilo han sido Manuel Vallejo, Marchena, Enrique Morente o Naranjito de Triana.
Graves: Nombre que se da a las tres últimas cuerdas o bordones y, por extensión, sonido que éstas producen.
Guajiras: Guajiro es la palabra española con la que se designa a los campesinos blancos de Cuba. Es por tanto, un cante de ida y vuelta procedente del folclore cubano, con copla de diez versos octosílabos o décima. Nacido en los puertos de Cadiz, sus letras se refieren sobre todo a La Habana y a sus habitantes y su compás es el mismo que el de la bulería, aunque con distinta acentuación. Se ejecuta siempre sobre tonos mayores. Según muchos expertos este cante debería llamarse en realidad punto cubano, pues ya existía en Cuba con este nombre. Gran parte de su riqueza melódica se le debe a Pepe Marchena.
Guitarra: Instrumento principal del Flamenco, es de cuerda y se compone de una caja de madera, a modo de óvalo estrechado por el medio, con un agujero circular en el centro de la tapa y un mástil con trastes. Seis clavijas colocadas en el extremo de este mástil sirven para templar otras tantas cuerdas aseguradas en un puente fijo en la parte inferior de la tapa, que se pulsan con los dedos de la mano derecha mientras los pisan los de la izquierda donde conviene el tono.
Guitarrero: En la jerga flamenca, nombre que se les da a los constructores de guitarras.
Hermética: Época más primitiva del cante, llamada así porque sus defensores estiman que el mismo se desarrollaba solamente en la intimidad de los hogares de los gitanos y que cuando salía de ese ámbito perdía carácter.
Intrazonal: Variación de un mismo tono.
Irse de traste: Defecto de construcción de una guitarra por el que el sonido de los trastes no corresponde con el que debería pese a que, al aire, el instrumento está perfectamente afinado.
Jabegotes: También conocido como cante de los marengos. Es un cante abandolao propio de las costas malagueñas, más concretamente de las jábegas marineras. Está casi en desuso.
Jaberas: Cante con copla de cuatro versos octosílabos que pertenece al grupo de los fandangos abandolaos. Su nombre parece provenir de una vendedora de habas a la que se atribuye su creación: La Jabera. Se trata de un fandango que se acompaña por arriba y que exige grandes facultades en el artista que lo interpreta, pues dominan en él los arabescos y melismas y apenas hay lugar para la respiración. Es uno de los más antiguos estilos malagueños y sus principales intérpretes son Fosforito, Curro de Utrera, El Chocolate o Carmen Linares, entre otros.
Jacaranda: Tipo de madera utilizada por los constructores de guitarras para la elaboración de los aros y el fondo. También baile primitivo.
Jalear: Acto de acompañar al cante con palmas o exclamaciones.
Jaleo: Acción y efecto de jalear y también conjunto de expresiones, locuciones admirativas e interjecciones que se prodigan para expresar entusiasmo o para animar a los intérpretes. Puede darse tanto entre el auditorio como entre los mismos ejecutantes. algunas de esas expresiones, en fonética andaluza son: ?¡olé!?, ?¡ezo e!? ?¡Agua!?, ?¡azúcar!?, ?¡toma!? ?¡así se canta?!, ?¡mu bien dicho?!, ?¡vamos allá?!.
Jaleo: Es la bulería que se practica en Extremadura, con cadencias monótonas y ritmo bailable. Ha sido utilizada por muchos guitarristas para sus conciertos.
Jipío: Sonido agudo, como un ay prolongado, en el que se apoyan los tercios de entrada y salida de cada frase del cante. Su función principal es dar jondura, aunque a veces el cantaor lo hace para templarse.
Jondo, jondura: Intensidad emocional y expresiva con que se califica generalmente a los estilos más profundos y de raíz. Se denomina así a ciertos estilos que expresan solemnidad, sabor arcaico y primitivismo. Aplícase, en definitiva, a aquellos cantes, bailes y toques caracterizados por la fuerza expresiva de sus sentimientos y la profundidad vital.
Juerga: Fiesta o reunión de aficionados e intérpretes en un ambiente idóneo para la mejor manifestación del cante, el baile y el toque.
Junquillos: Filos decorativos que lleva la guitarra alrededor de toda la caja de resonancia y en el centro de la parte trasera del mástil. Su dibujo es igual que el del mosaico de la boca.
Laina: Tipo de voz en el cante flamenco (fina).
Lazos: cruces de pie, en los que se apoya el peso sobre la media punta y los talones se van girando abriendo y cerrando la posición para adelantar.
Le
vantica: Modalidad de taranta propia de Cartagena que tiene una caída a tonos menores. Ha sido interpretada, sobre todo, por Pencho Cros, Encarnación Fernández, Antonio Piñana y Juan Valderrama.
Ligado: Técnica de la mano izquierda que consiste en pulsar varias notas con una sola digitación de la mano derecha arrastrando los dedos por los trastes para aprovechar la duración de vibración de la cuerda.
Liviana: Cante procedente de Cádiz y Sevilla, con copla de cuatro versos, primero y tercero heptasílabos, segundo y cuarto pentasílabos, con rima en los pares. Es un cante por seguiriyas con algunos matices que recibe su nombre, en teoría, por ser más fácil de ejecutar que ésta. Se suele cantar poco y en la actualidad su uso se ha relegado a la preparación de la serrana, como copla de adaptación.
Llamada: determina la acción de llamar y se utiliza como señal para que el cantaor comience a cantar. La medida esta adaptada al compás del baile que se interpreta. En la llamada se reconoce el palo al instante porque siempre han de llevar esa estructura prefijada que diferencia, por ejemplo, un tango de una rumba.
Lorqueña: En realidad no se trata de un palo propiamente dicho, pues la lorqueña se apoya, por lo general, en la bulería. Lo que ocurre es que Federico García Lorca creó una serie de canciones aflamencadas interpretadas por primera ver por la Argentinita que han pasado a la historia como lorqueñas. Destacan el "Anda jaleo" o "En el café de Chinitas", cantes que luego plasmarían La Niña de los Peines y, más recientemente, Carmen Linares.
Luthiers: Nombre que recibe el constructor de instrumentos, entre los que puede estar la guitarra.